Oh benditas tardes televisivas!
Tardes en las que los realitys y concursos hacen las delicias de todo espectador, en las que aquel que no tiene pareja puede encontrar el amor de su vida. Tardes con una parrilla cargada de programación de entretenimiento donde se mezclan nuestras teleseries más castizas y los culebrones más latinos.
Y aquí, a estas horas, hemos de detenernos y analizar el extraordinario e inclasificable programa que nos ofrece Cuatro y que aúna la programación de toda la competencia.
Podríamos decir que se trata de un concurso en el que 24 chicas juegan para ganar un estupendo premio. Un regalo que según algunas de ellas “ha caído del cielo” y que de ninguna manera podrían encontrar en cualquier discoteca, ni en el propio lupanar del que parece que han salido las mismas aspirantes al premio. Treintañeros solterones es el presente más preciado para estas féminas con un único fin: mancillar como perras en celo (o esa es la imagen que se vende en este espacio televisivo)
También es un programa auténticamente nacional ya que la tradición se torna ahora en entretenida con la figura más lasciva de nuestra literatura presentando este programa. Tras aquella vieja del medievo de voz ronca que describía Fernando de Rojas, se esconde a día de hoy un radiante mancebo con un dulce acento venezolano. Celestina es reencarnada por las tardes en el cantante Carlos Baute.
Sí sí, ese de “Colgado en tus manos”, ese gran comunicador, el verdadero maestro de la improvisación, el famoso latino que deja a un lado las muletillas y ejerce como un verdadero literato. En definitiva, una verdadera starlette que diría nuestro admirado exdirector de la RAE, Lázaro Carreter.
Con este intermediario hablando nos vienen a la mente Gavilanes, Esmeraldas, Rubís, Gatas salvajes y otros nombres de producciones que han cruzado el charco, por ello podríamos encasillarlo también en el apartado de culebrones.
¡Qué argumentar de un subastador que al terminar la puja consuela a los “hombres regalo” con frases como “mira lo que te llevas” o “además hay que ver qué piernas tiene”!
“Elígeme” podríamos decir que es un programa único, completo y en el que el papel de la mujer se ve reforzado con la actuación de las mismas.
Viendo esta apuesta de la cadena del grupo Prisa, es triste pensar que el colectivo feminista, no denuncie este espacio dedicado a la denigración de la mujer, que no ataque contra este mercado gratuito de la carne, que no interfiera en esta violación a la imagen de las damas.
Bueno, quizás también es comprensible pensar que ninguna mujer, por muy feminista que sea, considere que estas 24 prostitutas gratuitas representen el prototipo de una fémina de los pies a la cabeza.
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